Pamplinas de una vida

sábado, 9 de enero de 2010

Ya no quiero humildad

Sal. Y crea como lo haces siempre.
Conviértete en imperecedera.
Bien, mal, regular, pero con esa vida tuya que nadie tiene.
Esboza la infinitud.
Sonríe aunque quieras gritar que estás harta de ser feliz.
Invade ese escenario como si fuera un ensayo más sin telón.
Demuestra que no estás aquí por casualidad, por una extraña ocasión de lo que algunos llaman destino.
Miente para que entiendan la verdad.
Hazlo y el embuste de sus palabras acabará en silencio.
O aún mejor...en aplauso.

1 comentario:

  1. Quiero verte invadiendo escenarios y alcanzando aplausos, pronto! :)

    ResponderEliminar