Pamplinas de una vida

jueves, 13 de septiembre de 2012

El que era el vuestro

Cuando una persona cambia. Y la ves y piensas “ya no eres la misma persona”. De repente le da por hablar en un idioma que nunca habló, ese que a ti siempre te gustó hablar pero no entendía. Y te preguntas ¿por qué ahora sí? ¿Qué ha cambiado? Y ya no quieres hablar en ese idioma porque te gusta más el tuyo, el que era el vuestro hace unos días.


Sólo
hay
un momento
en el que empiezas
 a querer
usar
otro idioma.
Sólo uno.
Cuando quieres
 comunicarte
de una manera irrefrenable
 con alguien.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Cuando faltan los detalles



Cuando faltan los detalles alguien se siente más muerto. No más triste, ni más infeliz. No siente más dolor, ni pena. Hay una parte que deja de esperar. Y no se siente distinto, ni especial. Empieza a valorar otras cosas. Le empieza a gustar ir al lado de la ventana del tren, correr al primer vagón, llegar a Atocha tres veces al día, mirar los relojes de la estación, pensar en tomarse un café en el restaurante que hay encima de las tortugas, llegar a casa, llegar muchas veces a casa en un mismo día, sonreír cuando le apetece y en fin,  todos esos pequeños detalles.