Pamplinas de una vida

lunes, 1 de abril de 2013

Cuatro meses



-          Desde enero y ya es abril
-          ¿Dónde has escondido estos cuatro meses?
-          Creo que los metí en el cajón ese de arriba
-          Es una caja
-          Es un cajón
-          Pues lo de ahí arriba es una caja
-          Entonces no
-          Y si no están ahí, ¿dónde están?
-          No lo sé
-          Muy bien…
-          Además no los escondí, los guardé
-          Si no sabes dónde están, ¿cuál es la diferencia?
-          Si los hubieses guardado tú no estaríamos discutiendo por esta tontería
-          ¡Son mis meses!
-          Los nuestros
-          Tantos para nada
-          ¿Para nada?
-          No, lo que quiero decir es que ¿de qué sirven tantos meses si los perdimos?
-          ¡Qué no los perdimos, qué están guardados!
-          ¿Dónde?
-          ¿Qué más da?
-          ¡Aquí están!
-          En el cajón…
-          Mírales, ¡qué bonitos!
-          Todavía nos quedan ocho más
-          Pues aquí ya no caben
-          Buscaré otro cajón…
-          Pero acuérdate de dónde lo dejas
-          Tampoco  tenemos tantos huecos para encajarlos
-          Bueno, pues déjalo ahí arriba, con la caja esa
-          ¿Y si los dejo en la caja?
-          En la caja no, en el cajón